jueves, 29 de marzo de 2012

Siempre hay oportunidades para ser bendecidos


A veces nos pasamos la vida esperando que las bendiciones caigan del cielo así como así, nos olvidamos que la responsabilidad de salir adelante en nuestra vida es de nosotros mismos, somos nosotros quienes con esfuerzo y dedicación logramos cumplir nuestras metas y objetivos. Cada cosa que nos propongamos debemos tener claro que la queremos cumplir porque nos hace realmente felices, pero debemos tener en cuenta al mismo tiempo que habrá momentos en los que las cosas no salgan como uno quiere. Dolor, tristeza, rabia, impotencia, y otros sentimientos que el ser humano saca a relucir cuando no se le dan las cosas que planea, éstos, son sentimientos muy normales dentro de nuestra condición humana, pero nunca debemos dejar que nos ganen la batalla, es decir, por muchos que sean los inconvenientes, si luchamos, si nos reponemos, si aprendemos de las cosas que salieron mal para mejorarlas y cumplir con nuestras metas, créanme que siempre las bendiciones se derramarán sobre nosotros.
Dios con su inmenso amor nos deja ser personas libres, somos constructores de nuestras vidas, así que el llamado es a que nunca te dejes vencer por las cosas negativas que te sucedan, todo lo contrario, son oportunidades que el mismo Dios te coloca para que aprendas e inicies un nuevo camino de triunfos.
El ser humano es maravilloso, tú puedes lograr lo que te propongas, ya estás bendecido por Dios y tienes todo su apoyo, solo debes ser dedicado y tener claro tus objetivos, son la mejor fórmula para llegar al éxito, y sé que estás para las  grandes cosas, animo, recuerda que el Dios que es amor siempre te acompaña.
Todo el amor de Dios es para ti, te ama porque te creó, y quiere lo mejor para ti, por eso, día a día estas siendo bendecido, cada oportunidad que tienes en la vida es una bendición y una forma de llegar hasta donde quieras.

domingo, 11 de marzo de 2012

Nosotros tenemos la decisión

Cada momento en la vida podemos encontrar sensaciones nuevas, pensamientos diferentes, pero siempre debemos tener coherencia en todo lo que hacemos, sentimos y pensamos, entiendo que los sentimientos nos impulsan a decir y a realizar acciones sin pensar mucho, pero es ahí donde debemos tener en cuenta que somos seres humanos, y como tales tenemos la capacidad de pensar. He escuchado a muchas personas que dicen que es imposible ser fiel, pero en esta ocasión he decidido hablar un poco a cerca de la fidelidad de los sentimientos, es decir, en la vida hay que ser constantes, no podemos dejarnos llevar por sensaciones efímeras que lo único que hacen es perjudicarnos y llevarnos a tomar decisiones poco convenientes para nosotros, por eso reitero que depende de nosotros mismos ser fieles en cuanto a lo que sentimos, a si nadie se entere de que fallamos en cuanto a lo constante de nuestros sentimientos, Dios nos conoce y gracias a eso nos dará la suficiente fuerza y sabiduría para tener la constancia correspondiente en cuanto a lo que tiene que ver con los sentimientos y si fallamos nos da siempre la oportunidad de salir adelante, eso sí, nos toca asumir las consecuencias de nuestros errores, pero siempre habrá tiempo para mejorar.
La fidelidad es una decisión del ser humano, no caigamos en juegos tontos que nos hacen daño y terminan maltratando a personas que nos quieren, debemos ser pacientes, tranquilos y pedir al dueño de la vida discernimiento para poder decidir correctamente.
Coloquemos las cosas en una balanza, es una buena forma de saber  lo que en realidad queremos, es decir, si analizamos bien que sentimos podremos tomar las mejores decisiones, así, no dañaremos a los que nos aman y mucho menos a nosotros mismos, la idea es siempre estar claros en los sentimientos, y esa claridad se tiene con disposición y con verdaderas ganas de estar tranquilo.
En fin, nadie dijo que iba a ser fácil, pero si podemos ser fieles a nuestros sentimientos y convicciones, debemos estar dispuestos a querernos y valorarnos y partiendo de ahí, podemos valorar a todos los que nos rodean.